Dentro del desarrollo del constitucionalismo en España y México puede ubicarse una matriz normativa en común, cuyas reminiscencias históricas todavía están presentes en los textos fundamentales que rigen en ambas naciones. La Constitución de Cádiz de 1812, ha permeado en la impronta jurídica de los territorios en los que rigió, pues tal como su redacción señalaba: «La Nación Española es la reunión de todos los españoles de ambos hemisferios».

Tras la Independencia de México y la consolidación de España como el país que hoy se conoce, ambos Estados emprenderían senderos distintos, aunque entrecruzados por nuestro mestizaje histórico, así como constitucional. Por todo ello, resulta pertinente plantearse el siguiente cuestionamiento: en esa vereda hacia el constitucionalismo, ¿cómo se fueron desarrollando los principios y derechos fundamentales para cada sistema? ¿comparten todavía rasgos en común? ¿Es mejor un sistema constitucional que otro desde el punto de vista de su evolución histórica?

Esta obra ofrece un análisis de Derecho comparado sobre el desarrollo histórico-constitucional entre España y México, en el que se evidencia cómo cada uno de estos principios y derechos constitucionales fueron expandiéndose y evolucionando con el tiempo en ambas naciones hasta consolidarse en lo que actualmente son nuestros sistemas constitucionales del Siglo XXI.